Esta variedad de olivo es muy resistentes a las sequías y a las heladas, por ello es una de las variedades más cultivadas en La Mancha. El fruto es largo y puntiagudo, con forma de cuerno, de ahí su nombre.
De color amarillo verdoso, olor frutado intenso. En boca muestra valores suaves de amargo y picante, presentando notas intensas de tomate maduro, de textura fluida y aterciopelada.